Los ingenieros de Volvo Penta están garantizando, probando y evaluando las soluciones de transmisión eléctrica diseñadas para ayudar a impulsar la próxima generación de productos de la compañía. La colaboración es la clave, y Volvo Penta colabora estrechamente con clientes y proveedores para explorar soluciones viables de línea motriz eléctrica.
“Las necesidades de sostenibilidad medioambiental están más cerca que nunca de las necesidades comerciales de los clientes, ya que las opciones eléctricas son cada vez más factibles”, afirma Peter Granqvist, director de tecnología de Volvo Penta. “Las necesidades individuales en sectores como la construcción, la minería y el manejo de materiales varían, al igual que para las aplicaciones marinas comerciales y de entretenimiento. Sin embargo, ahora hay una clara tendencia de todos los grupos de clientes: la necesidad de líneas motrices más limpias, más silenciosas y más eficientes”.
Aprovechando las plataformas probadas del Grupo Volvo, utilizando la última tecnología para el almacenamiento de energía en baterías y colaborando directamente con los clientes, Volvo Penta creará soluciones de movilidad beneficiosas para todos que permitirán a los clientes hacer avanzar sus negocios.
Plataforma tecnológica probada
Un beneficio indudable del hecho de formar parte del Grupo Volvo es el acceso a tecnología avanzada. Volvo Penta sigue desarrollando la demostrada plataforma de electromovilidad que lleva años siendo utilizada con éxito por las divisiones de autobuses y camiones de Volvo. El nuevo taller de la empresa dedicado a la electrificación está ubicado justo en frente del equipo de electromovilidad de 140 miembros del Grupo Volvo. Ambos equipos están colaborando estrechamente en la búsqueda de sinergias entre diferentes aplicaciones, así como en el desarrollo de nuevas soluciones para clientes de Volvo Penta.
La tecnología de baterías es crucial
Los factores que han limitado la creación de soluciones eléctricas de servicio pesado comercialmente viables han sido la capacidad, el peso y los tiempos de carga de la batería. Pero los desarrollos de la última década han llevado a la proliferación de nuevos dispositivos alimentados con batería, desde smartphones, drones y bicicletas eléctricas hasta sistemas de almacenamiento de energía a escala de la red.
“Este amplio despliegue de tecnología de baterías significa que cada vez hay un mayor conocimiento y una mayor capacidad que poder compartir entre los distintos sectores”, afirma Thulin. “El aumento de la densidad de energía y la reducción del tamaño de las baterías permiten nuevos diseños de máquinas. Y la reducción del coste significa que el coste de propiedad está llegando a un punto en el que, para varias aplicaciones, resultará más rentable utilizar una máquina eléctrica que una con un motor convencional. Además, la reducción de los tiempos de carga y el aumento de la disponibilidad de infraestructuras de carga en los almacenes de los clientes y en otras ubicaciones centrales también serán importantes argumentos para fomentar la electrificación”.
Colaboración con el cliente
Un factor clave para que Volvo Penta desarrolle soluciones eléctricas es ayudar a los clientes a garantizar el futuro de sus negocios. Como tal, la empresa está colaborando con los clientes para valorar las mejores opciones y ejecutar proyectos piloto para determinar la dirección del desarrollo futuro del producto.
“Es esencial pasar tiempo con los clientes, tanto los OEM como los operadores, para comprender cómo pueden beneficiarse de la electrificación, cómo se deben utilizar las máquinas y los equipos, y cómo y dónde se puede incorporar la carga en la actividad”, afirma Thulin. “Si conocemos todos estos detalles, podemos proponer un sistema ajustado a sus necesidades”.